
17 de junio de 2025
Cada 17 de junio se conmemora el Día Mundial de Lucha contra la Desertificación y la Sequía, una jornada para recordar que los suelos fértiles son la base de la vida, la seguridad alimentaria y el equilibrio climático. Hoy, más del 40 % de la superficie terrestre del planeta muestra signos de degradación, una crisis silenciosa que está dejando sin sustento a millones de personas en todos los continentes.
Menos lluvia, más incertidumbre: las sequías prolongadas y la disminución de las precipitaciones reducen la capacidad del suelo para retener humedad, incrementando el riesgo de erosión y desertificación.
Biodiversidad amenazada: más de un millón de especies vegetales y animales enfrentan la pérdida de hábitats debido a la degradación del suelo y al colapso de los ecosistemas asociados.
Rentabilidad sostenible: restaurar tierras degradadas es una inversión con impacto real: por cada dólar destinado a la regeneración, se pueden generar hasta 30 en beneficios económicos y sociales, desde la productividad agrícola hasta la prevención de migraciones forzadas.
Solución regenerativa: cuidar el suelo significa cuidar el agua, la vida y el clima. Las prácticas de manejo sostenible, la reforestación y la agroecología son herramientas esenciales para revertir la crisis.
La desertificación no es un fenómeno natural inevitable, sino el resultado de una gestión inadecuada de la tierra. Aún estamos a tiempo de revertir la tendencia con políticas coherentes, innovación y cooperación internacional. Restaurar suelos degradados implica revivir ecosistemas, recuperar empleos rurales y reforzar la seguridad alimentaria.
En New Value creemos que proteger la tierra es invertir en resiliencia. Cada hectárea restaurada representa una oportunidad para reconstruir el equilibrio entre humanidad y naturaleza. Frente a la desertificación, la indiferencia no puede ser una opción: la regeneración de la tierra es, también, la regeneración de nuestro futuro.