
10 de julio de 2025
En la carrera hacia la neutralidad de carbono, el sector aéreo continúa siendo uno de los más difíciles de descarbonizar. Por eso, Europa se prepara para aplicar un nuevo impuesto climático dirigido a los vuelos con mayor huella de carbono, especialmente los jets privados y las clases premium. La medida no busca prohibir el lujo, sino equilibrar la balanza de la justicia climática: que quien más contamina también contribuya más a la solución.
Emisiones desproporcionadas: los jets privados pueden generar hasta 2 toneladas de CO₂ por hora de vuelo, con una media de apenas cuatro pasajeros a bordo.
Desigualdad climática: estos trayectos representan menos del 1 % del tráfico aéreo, pero contribuyen con cerca del 10 % de las emisiones totales de la aviación.
Responsabilidad compartida: el nuevo impuesto pretende corregir ese desequilibrio, alentando un uso más eficiente de la aviación y promoviendo el desarrollo de alternativas sostenibles, como los combustibles de aviación limpios o los trenes de alta velocidad para trayectos cortos.
El impuesto es solo una parte de una estrategia climática más amplia que busca reformar el transporte aéreo desde la innovación y la transparencia:
Incentivos para el uso de combustibles sostenibles (SAF): promover la transición tecnológica hacia fuentes bajas en carbono.
Mayor eficiencia operativa: optimización de rutas, aviones más ligeros y motores eléctricos o híbridos en fases de desarrollo.
Contribución equitativa: que las empresas y personas con mayor capacidad económica asuman un porcentaje justo del coste ambiental que generan.
Este tipo de medidas reflejan una verdad cada vez más clara: la sostenibilidad debe aplicarse en todos los niveles, desde la tierra hasta los 10 000 metros de altura.
En New Value creemos que la justicia climática implica responsabilidad proporcional. Hacer pagar más a quienes más contaminan no es castigo, es coherencia. Porque el futuro sostenible que buscamos no se mide en kilómetros recorridos, sino en la capacidad de volar sin dejar tras nosotros un cielo más gris.